C.A. TRISTAN SUAREZ
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CLUB ATLETICO PLATENSE
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9ª fecha
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SABADO 04.04.2015-15hs
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Los partidos se dividen en
dos etapas, y Platense , le dejó todo
el primer tiempo al conjunto de Ezeiza.
Esto es lo que ocurrió hoy
en la cancha, donde de entrada “el lechero” se adueñó del campo de juego,
ante un Platense desdibujado, desorientado y sin haber molestado al arquero
local, salvo un tiro de media distancia de Miranda, que sin esfuerzo, llego a
las manos del guardameta. Esta fue la única jugada de peligro con que nuestro
equipo totalmente a la deriva, se mostró en la etapa inicial.
No funcionaron los
volantes ni en lo defensivo ni en el ataque, dejando a un perdido Daniel Vega,
en absoluta soledad, al extremo que para hacerse de la pelota se replegaba
junto al resto, en el propio campo calamar y lejps del arco rival. No le llegaba la pelota.
Decir que en el primer
tiempo Platense no existió y que la sacó barata con el único tanto logrado por
Tristan, tras un certero cabezazo de David
Sarco a los 43´., para nada es una exageración.
Esto insinuaba una catastrófico final, que no fue tal.
En el segundo tiempo todo cambió, y mucho. Así como hace unas fechas atras, expresábamos que en el descanso Pedro Bocca debió ajustar las piezas, hoy dio la sensación que uso un nuevo shanpoo, que le dio buen resultado Ya a los tres minutos de juego el marrón había inquietado tres veces al arquero Beltramella. Platense era distinto. Monzón a su mejor estilo, replegó a su equipo y nuestro elenco se adueñó del partido, acosándolo de tal manera que el merecimiento hubiera sido, al menos de tres tantos de diferencia.
Platense copó el centro de
la cancha, con un Gianunzio que comenzara a manejar al equipo y Walter Ortiz
sobre la izquierda, que hilvanaba las jugadas que no podían concretar ni Vega
ni Miranda solo por infortunios. No entendemos el cambio de Gianunzio a los 12`,
tampoco este que salio molesto, pero su reemplazante, el pibe Palavecino(18)
jugador de las inferiores, que esperamos pertenezca a Platense, no desentonó y también
se hizo dueño del medio campo, con toda la autoridad de un veterano y hasta atreviéndose
a acompañar a un ataque punzante en pos de goles.
Tristan Suárez se defendía
y Platense atacaba sin piedad, perdiéndose una importante cantidad de conquistas que
merecía con creces y no pudo concretar por esas cosas del fútbol.
Injusto resultado para un partido donde los de Nuñez, sin
duda alguna, fueron merecedores de un triunfo contundente.
Debió ser Platense, lejos de amilanarse en la primera parte, quien de entrada saliera a presionar, e irse al descanso al menos con un empate.
Una derrota que duele en
lo moral, pero que nos dejó la sensación agridulce, que si el equipo entiende
que jugando de entrada, como lo hiciera en la segunda parte, no se le pueden
escapar estos puntos perdidos tontamente, ante un rival que para nada fue superior..