Si bien seguimos por la buena senda de
continuar sumando, hoy PLATENSE nuevamente careció de eso fundamental
que es lo que te dan las victorias.
O bien el calamar respetó nuevamente a su rival, o se da lo que venimos marcando casi permanentemente. No existe un jugador manija que pueda iniciar una jugada y tocar con sus compañeros. Si bien el resultado fue justo, debemos reconocer que Central siempre llegó mas armado en sus ataques, con tres puntas bien definidos, que ya sea por los defensores, Ojeda, y la mala puntería de sus tradicionales goleadores, no marcaron la diferencia en el tanteador.
Platense jugó a la pesca de los errores de la defensa canalla, pero con solo un delantero es imposible convertir. Si bien tanto Mansilla, demasiado abierto y atrasado como Curuchet participaron de los confusos ataques de PLATENSE, no lograron amalgamar el juego de conjunto que ameritaran las circunstancias.
Central mostró una defensa floja que sacaba todo cuanto podía, pero nuestro equipo no llegaba armado y “jugando a la pelota”. Por una falla de la defensa, el marrón convierte su gol.
Seguramente el técnico habrá observado estas falencias, que son remediables sin duda.
Salimos del teclado y como cualquier hincha conformista del tablón, bien podemos decir que aunque de a uno, se sigue sumando y manteniendo ya seis encuentro sin derrotas. Lo curioso y desalentador es que no podemos ganar de locales. Esperemos en Varela, seguir por este camino, pero con algunos retoques en la maquinaria.
GENTILEZA ESPN