E
|
l tiempo
pasa y claramente la tabla se va fragmentando en cuatro capítulos. Los que ya
asoman como candidatos firmes para pelear el ascenso directo, los que ya prácticamente
están acomodados a la espera del reducido, los que pelean fecha a fecha por
ingresar a este y los que ya bajaron los brazos, resignados a continuar en la
categoría.
¿Dónde esta Platense?
Los números
y la estética del cuadro de posiciones, nos muestran, que estamos ahí, en el
tercer grupo, donde cada fecha se convierte en una verdadera final, para poder
lastimosamente, como es costumbre arraigada en los últimos cinco años. Ingresar
al lote de los que a duras penas se inscribieran a los torneos consuelo.
Desde
nuestro lugar, entendemos que dadas las condiciones en que tristemente hoy esta
conducido el club desde la incompetente dirigencia, las cartas están echadas y
solo pasará por la mano dura e inteligente de ella, la sabiduría de entrar en
los vericuetos que hacen a estas ocasiones y evitar presiones inoportunas en
este momento aciago.
Cuando
decimos mano dura, entre otras cosas es darle al cuerpo técnico y jugadores,
todo lo necesario, incluidos salarios, para tranquilizar las aguas y evitar que
ya, desde la diversidad de micrófonos comiencen a tirarse nombres para
reemplazar al actual técnico, ya que parece ser, según el resultado a obtener
hoy en al Francisco Urbano de Castelar, en el vestuario estaría ubicada la
guillotina.
¿Otro técnico?
Si bien desde siempre nos quedó claro que el elegido no era el ideal, hoy
entendemos que no es momento para otro cambio, ya que esto significaría
comenzar de nuevo. Otro técnico aventurero seguramente eyectado de otro clubcon
su caset bajo el brazo “…..vengo a Platense porque es un grande”)
y con un plantel que no da más de lo que ha mostrado hasta la fecha y que ante
el fracaso, su argumento será “yo no elegí los jugadores, es lo que había”
Es para
pensarlo y no tomar decisiones equívocas y apresuradas, ya que esto significará
seguramente otro conflicto legal y no será en absoluto la garantía del éxito para
lo que resta del torneo, ni para el inicio del próximo.
Nuestra
modesta opinión, es que si Anselmo presenta
la renuncia, traguemos saliva y nos resignemos, una vez más a continuar con
un técnico del club, caso Palito Brandoni y que ¡¡¡Dios nos ayude!!!
Aunque la solución definitiva de la institución,
es esperar un gesto de dignidad de la actual administración y llamar a
elecciones para diciembre, lamentándolo por aquellos que se quedarían sin su ingreso
mensual.
Pero
queda latente una pregunta clave ¿Existe
hoy en PLATENSE, gente facultada con voluntad, vocación, sabiduría y capacidad
de convivencia para remontar con un proyecto concertado todo el hundimiento al
que fuera sometida la institución desde que se iniciara el nuevo siglo?
Este es
otro tema, que amerita otro tipo de análisis mucho más profundo, aunque bien se puede anticipar lo que significará la
gran pregunta?
¿Qué quiere el socio de PLATENSE, seguir siendo este, un club de barrio conducido como una sociedad de fomento llena de kioscos, o volver a ser aquel club de constante progreso que nos caracterizara ante propios y extraños? ¿Ser o no ser?