Quienes
felizmente recorrimos gran parte de la historia de Platense, y conocimos a este
como verdadero ejemplo de Institución en todos los aspectos que soñaron quienes
lo engendraran y le dieran continuidad por un siglo, nunca imaginamos que con
el paso del tiempo y justo al ingresar al segundo centenario, la gloriosa entidad
nacida en Recoleta y que ramificara sus raíces en el barrio de Núñez/Saavedra y aledaños, cayera tan
estrepitosamente.
El hoy de
Platense es sencillamente lamentable. Quizá quienes sin conocer las intimidades,
observen la paupérrima tabla de la tercera categoría, donde se ostenta la
punta, nada entenderán del significado de esta nota editorial. Pero sí lo
comprenden, quienes desde siempre vivieran la institución desde sus entrañas.
El mencionar como
fecha bisagra el ingreso al segundo siglo, y haciendo gala de la memoria,
recordamos la penosa conmemoración del centenario, como prologo del ingreso a
la decadencia. Una fiesta regalada por el ex intendente, que significara un mero
evento de municipales, por sobre el sentido épico del acontecimiento,
demostrando la incapacidad de quienes por entonces, se erigieran como los
salvadores de turno. ¡¡¡Los nefastos dorados
con purpurina carnestolenda!!!!
Pero esto que es
solo anecdotario, nos lleva a la reflexión y a la vergüenza, al ver en otras
entidades contemporáneas, aún de menor predicamento; el sentimiento, el amor y
el respeto hacia los colores que los cobijara junto a sus ancestros, a la hora
de sus festejos centenarios.
El segundo siglo
de Platense empezó muy mal y continua peor. Social, deportiva y culturalmente,
se ha roto la cadena de la pasión y la mística característica de una entidad
que ha perdido hasta el arraigo. Los mayores hemos bajado los brazos
definitivamente, dejando el espacio a jóvenes generaciones de monjes negros
nefastos, que creen haber sido los refundadores del club. Y si analizamos la
historia en un simple juego de palabras, vemos que solo han sido los co-refundidores
de una institución que aunque hoy nos muestre un ilusorio éxito solo en
lo futbolístico, el resto resulta
sencillamente lastimoso.
El último 7 de
noviembre, se celebró un nuevo día del periodista deportivo. Hace exactamente
un año, desde este espacio rendíamos homenaje a todos aquellos profesionales,
que valoraran con su pluma y su palabra el verdadero significado y predicamento de
la marca “CLUB ATLATICO PLATENSE” (ver
nota 7/11/2011)
Hoy, el nombre de
Platense esta raleado de las paginas deportivas y de los programas del fútbol
grande. Solo somos en los ciclos de
ascenso, uno más de aquellos clubes que hasta hace apenas dos décadas, mirábamos de
reojo desde nuestro sitial de protagonistas del fútbol grande, cuando nuestro
club era serio, creciente, respetado y reconocido de una apoteosis que no en
vano aglutinara a cinco fieles generaciones.
Pero esto es
pasado, el hoy nos dice que un ciclo radial que llegó a su fin, “el ascenso por
la red” nos sirvió para penosamente degustar el sabor amargo en una madrugada
de agosto de 2010, cuando su conductor Gabriel Anello, con filosas palabras,
nos clavara una daga, al presentar en sociedad a quien, totalmente desconocido
en el mundo calamar, se perfilara como candidato a las elecciones de diciembre
y que hoy ostenta el sello de titular de la institución. Si bien nunca compartimos
el grado de desparpajo de este tipo de periodismo, rebobinamos aquel momento de
archivo, y debemos reconocer que aquella fatídica pintura oral que nos
avergonzara, no dista en nada de la realidad que hoy ha quedado plasmada como
cierta, en el triste escenario del presente.
Si bien esta
penosa situación es vox populi mas allá del entorno de la intimidad de nuestro
club, quienes han sido obsecuentes a los manejos personalistas, permaneciendo
incólumes, se han trasformado en cómplices de hecho de este camino al abismo y
solo la historia será fiel testigo para catapultarlos como complacientes en el naufragio
a que se ha expuesto a la institución. Y
mucho más, a aquellos dorados desteñidos que luego transformados en
azules, le dieran continuidad a la decadencia vigente ya considerablemente
agravada y de la que fueran sus precursores.
Como lo hemos
expresado en más de una oportunidad, este maléfico transito que hoy debemos
soportar, no es propio del principal protagonista. Estamos a horas de ingresar
en la recta final del trieño más aciago
de la historia del C.A.P. y nos preguntamos ¿Y después que….?
Lo podemos
asemejar a la vida política del país, donde se exterioriza el disconformismo, pero la
pregunta es ¿Cuál es el proyecto serio
que a estas horas ya debería percibirse como futuro alternativo por parte de la
oposición? ¿Existe hoy en Platense la suficiente madurez intelectual para
declinar odios, celos y resquemores para involucrase en pos de objetivos
comunes y para rescatar cuadros de dirigentes probos netamente calamares para
conformar una única lista de oposición?
Si se continúa fragmentando la hipotética oposición como
se vislumbra, no nos quejemos cuando aves negras ocupen los espacios que
los verdaderos calamares divididos, dejan al arbitrio de las circunstancias.
Caemos en un
lugar común, nos conocemos todos desde pibes, como así se conocieran nuestros
mayores, y si algo debemos reconocer y valorar con orgullo más allá de las
absurdas diferencias intestinas, es que ningún socio de Platense en la historia,
ha ocupado paginas policiales ni ha estado involucrado en temas urticantes, mas
allá de los lógicos dimes y diretes de los corrillos propios de toda pequeña
sociedad, hacia quienes participaran y se comprometieran por ella.
Platensistas
genuinos, los socios sean unidos,…. “o nos devoran los de afuera”. ¡¡¡Esa es la ley primera!!!
Platense va a ascender seguramente, pero quedará
un futuro muy gravoso como factura de pago por este logro. Hoy,
no podemos darnos la opción de llegar a las elecciones con una oposición
fragmentada. De ser así, las consecuencias serán irreparables.
Merecen un capítulo aparte, porque aún no ha quedado
claro, la permisividad de aquellos ex administradores que bajo su gestión,
adrede ¿…? o inoperancia, permitieran alterar los padrones sociales que
ayudaran a saltar el cerco a indeseables personajes, que hoy se han adueñado de
nuestro club.
Hacete tiempo y analizá algunas de las 560 notas
del blog, que vislumbran una triste realidad, y que de no darse en el próximo
año electoral, un vertiginoso golpe de timón, hará sucumbir definitivamente
todo el significado del que decís “es tu querido Platense”.
¡¡¡Leelo y razonalo!!! Tenés dos opciones: Tómalo o déjalo. Pero nunca olvides que vos como asociado, sos en tu cuota parte el dueño del club. Después no te quejes.
