CLUB A. TRISTAN SUAREZ 0
CLUB ATLETICO PLATENSE 1
No habrá que ser demasiado erudito en el tema, para asegurar que la pasiva
parcialidad calamar, sin dudarlo ni un instante, daba por firmado “un empate”. La poca ambición, el no me
caliento más, y el haberse acostumbrado al cotidiano (por años) ser uno más del
ascenso, daban casi por sentado que un empate era un triunfo, ¡¡¡Jugábamos con
el puntero!!! Que también hoy, ante un pobre rival, demostró que para nada es “el
cuco” del torneo, es solo uno más, que arrancó bien.
Además Platense venía precedido de fracaso tras fracaso. Cuatro fechas
sin conocer la victoria, con dos empates y dos derrotas sucesivas, no brindaban
un menú demasiado apetecible. Desde el 4 a 0
a Fénix-07-10-17- no se saboreaba el maridaje del
triunfo y el juego bonito y eficaz. Pasaron 34 días sin sumar de a tres y con
un equipo que en general deja aún mucho que desear.
Fueron cuatro fechas aciagas, 12 puntos perdidos, que de haber logrado solo el 50%, hoy después del triunfo ante “EL LECHERO”, estaríamos cómodos
punteros con 27 unidades en lugar de los 21 a los que hemos arribado
sin merito destacable.
Es que hoy Platense siguió por sus carriles normales, sin saber a que y
como juega. Desarrollar estas falencias, resultarían harto repetitivas y hasta lesivas
volver a describirlas.
En la primera etapa nada varió, solo con el agregado, que venimos
observando en las ultimas fechas, hoy agravadas, de utilizar la violencia por
sobre el juego. Si hablamos de codazos, estamos en punta. Y ni eso ha quedado
de nuestro viejo Platense. "Jugar limpio". Predomina el golpe artero al rival para juntar amarillas. Esto es
producto de la impotencia y de la terquedad de algunos de nuestros jugadores: Amonestados, Daniel Vega, Hernán
Lamberti, Juan Manuel Olivares, Marcelo Vega, Agustín Palavecino, Emanuel
Bocchino, Gustavo Toranzo
Sin dudas el ingreso de Carrasco de movida genera mas llegadas al arco,
aunque se lo ve timorato en algo que el bien conoce, patear de media distancia.
Corrían los minutos y aquellos que habían firmado el empate como un
cheque en blanco, se restregaban las manos por el puntito a lograr, recién a
los 37 minutos, parece que el calamar se dio cuenta que algo podía pasar a su
favor, quizá influenciados por el ingreso tempranero (64´ Daniel Vega) que
falto de fútbol, le dio mas movilidad al ataque. Una pelota en el palo de
Carrasco, a su viejo estilo ahogo el grito de gol y luego en una jugada “para
otro partido”, a los 83´, el golazo de Daniel Vega, que con su experiencia, al
ver venir una excelente pelota que le picara M. Vega desde 30 metros , le ganó la
espalda a un desesperado Ezequiel Vicente, que diera medio paso adelante para
despejar de cabeza, y pagando, lo dejó
solo al contador, para asentar en su pagina de Excel, el primer gol de su
temporada.
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Se ganó, es lo que vale, pero aunque alguien pueda suponer que nada nos
conforma, así no es el fútbol que practica Platense. En párrafos anteriores una
simple ecuación matemática lo evidencia. De haberse jugado sabiendo a que se quiere, hoy sin duda alguna, seríamos los émulos de Morón en la temporada anterior.
PLATENSE debe salir a ser protagonista, jugar a cara de perro, sin violencia, no adaptarse a aquello que le
propone el rival de turno, ¡¡¡el equipo sigue siendo largo!!! Aquí alguien
falla.
La respuesta y la solución la tienen quienes afirmaban a viva voz ¡¡¡SABEMOS COMO HACERLO!!! Bueno, demuestren
que esos tres años de preparación, no han sido en vano. Hoy, mirando la tabla
estamos abigarrados en un lote de más de nueve aspirantes.
De ahora en más seguir perdiendo
puntos resultaría letal.
