Nuestro peor pecado es
“VIVIR ENGAÑADOS”
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esulta preocupante el ver que muchos asociados de la
vieja guardia, aún creen que PLATENSE, es el mismo que vivieran durante gran parte
de sus vidas.
Siguen aún en la triste creencia que aquel club que movilizara a
toda la región norte de la
Ciudad de Buenos Aires y parte de Vicente López, continua
teniendo el predicamento que mamaron de sus mayores, sin apreciar que
lamentablemente, por la inacción de sus propios asociados, ya esto no es así.
Platense fue una institución con mística y prosapia que inspiraba respeto,
y esto se fue perdiendo lentamente porque quienes, sucedieran a las viejas
generaciones, no han sabido tomar la posta de un legado que debió ser perenne
con el paso del tiempo.
Nos atrevemos a expresar, que de aquellos “medianos y
centenarios clubes del quehacer deportivo nacional”, nuestra divisa es la que
mayor predicamento ha perdido. ¿Cruel no? Solo bastará hacer una recorrida mental por
aquellas entidades semejantes a la nuestra, para observar que no estamos
equivocados.
Ferro, alicaído y con graves problemas, es aún sinónimo
de Caballito y su parte social, si bien no es aquella cuantiosa de los `80 que
festejaba campeonatos, continúa alerta a los vaivenes del club, habiendo
solucionado un sin fin de dificultades con su directa participación, arremangándose
y poniéndose al frente a la hora en que “gerenciadores golondrinas”,
estaban a punto de la estocada final.
Varias son las razones que motivaron esta situación por
la que hoy atraviesa peligrosamente nuestra INSTITUCION.
Quizá la principal, es el haber perdido lo elemental, el
arraigo. Platense, como lo hemos expresado en reiteradas oportunidades, es el
fiel reflejo de aquella poesía que perpetuara Facundo Cabral, “No
soy de aquí, ni soy de allá”
Más allá de pretender en esta nota marcar culpables, es
de reconocer que hasta un momento clave de nuestra entidad, hasta mediados de
los noventa, el club se había insertando vertiginosamente en el distrito que lo
alberga, “Vicente López.”
Si bien por esos tiempos aún no se había logrado establecerse
en los barrios de elite del partido, ya el padrón social mostraba un cotidiano
ingreso de socios de Florida Oeste,
Carapachay, Munro y Villa Martelli. Es que se habían implementado políticas
para ello, y los resultados estaban a la vista.
Hoy los que se identificaran con el gran club de
Saavedra, Núñez, Belgrano, Urquiza, lentamente están dejando este mundo y aquel
mítico mojón en el corazón de Núñez, le ha dado paso a otra gente que ni idea
tiene que en ese predio donde hoy hay una escuela y un polideportivo, existió
para propios y extraños, el escenario donde brillaran las mas importantes
glorias del deporte argentino, mas la
confraternidad de un solo sentimiento indeleble, Platense.
Y cuando expresamos esto, lo hacemos con conocimiento de
causa. Quienes aún seguimos estoicos en el barrio, lo palpamos a cada instante,
sirviendo de cicerones de quienes ya no hablan del predio de Platense, sino
¡¡¡del poli!!!
En los últimos años y básicamente en lo que va de este
siglo que avanza, por más que nos quieran hacer creer que las relaciones con la
intendencia son óptimas, que el mismo Alcalde le implorara al hoy reelecto presidente que continúe, ante sus
tantas amenazas de renuncia, nada hacen en conjunto, para implementar estrategias
para que PLATENSE sea sinónimo del distrito.
Pero a todo esto, hay que agregarle que por estos años,
PLATENSE no da absolutamente nada. Desde lo más mínimo, una confitería social,
la comunión fraterna de las familias, hasta sus magras representaciones
futbolísticas, que por este camino expulsa toda voluntad de adscribiese a un
sentimiento casi tímido, militar a perpetuidad en la mas vergonzante categoría
del fútbol argentino.
Tampoco, nuestro Platense, se destaca por un deportista que surja de su cantera, hoy plenamente diezmada y en manos de extraños que la han hecho propia.
Muchos calamares aún siguen expresando que PLATENSE es un
grande, en una especie de auto engaño que cuesta asimilar como una triste
realidad. Hoy Platense es un club subdesarrollado cuasi inerte, que penosamente demuestra no
tener definido un rumbo, un objetivo, un proyecto y un crecimiento en ningún
aspecto.
Costará mucho trabajo, el reencauzar por el camino
correcto a esta vieja entidad de 109 años, símbolo de corrección y forjadora de
grandes deportistas en su historia, si los SOCIOS
VERDADEROS, no toman la determinación impostergable de inmiscuirse en la
cotidianidad de este barco a la deriva, que peligrosamente va en camino a
encallar.
La experiencia nos muestra que cuanta institución, que
por alguna razón le cediera su conducción a extraños, terminó en el peor de los
finales. Los clubes son de los socios que tienen como único carnet valido y
fehaciente “el
corazón caliente”
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Ya se aprecian
algunas diferencias en el accionar de la actual administración. Ya comienzan
los pases de factura con aquellos que hasta hace un par de meses, cohabitaban
el mismo fracaso. Ya el basquetball, bajo la tutela de un ex ferviente
admirador del patrón, empieza a recibir represalias ácidas.
En la página
oficial del club, aparece un titulo que interpretamos grosero y de ¡¡¡muy
mala leche!!!
¿En el fútbol
ante el primer traspié, también el titulero destilará tanta crueldad?
“Infeliz año nuevo”
Domingo, 12
Enero 2014 11:23- Prensa - Departamento de Basquetbol
- Club A. Platense
“Platense jugó mal y
perdió anoche frente a Pedro Echague por 78 a 63, por la 15ta fecha del Torneo Federal
de Básquet. Nahuel Calvo fue el goleador del “Marrón” y del encuentro con 20
puntos.
No fue un buen
comienzo de año para el básquet de Platense, ya que ayer por la noche en el
reinicio del Torneo Federal cayó como local frente a Pedro Echague por 78 a 63, por la 15ta jornada,
en un flojo partido en general del “Calamar”.
