Verdad....¡¡¡Consecuencia!!!!

Existe entre las tantas erudiciones del saber popular, un apotegma que expresa, “Los pueblos tienen los gobiernos que se merecen” Aunque muchas veces discutido, este axioma, creemos que muy bien le cabe a la sociedad calamar.

Historia

Esta, nos recuerda hechos posteriores a aquella epopeya, iniciada en 1970, cuando un grupo de jóvenes, reencauzaran la extrema situación que aquejaba a la Institución, y por apetitos de poder, comenzaron a generarse un sinfín de divisiones que más allá de lo político institucional, se transformara en enfrentamientos personales, llegando a pugnas impensadas. Aquellos, que en su momento habían conformado el bloque más sólido de una excelente gestión(a excepción del grave error de haber vendido la sede social), se transformaron en rivales, rayando las características del odio y el rencor.

Ingresar en detalles, resultará vergonzoso recordarlo. Ante estas afrentas personales, la institución comenzó a sentir los avatares de tanta discordia, con oposiciones políticas y sucesivas gestiones, que obligaron el deambular por el ascenso, y en primera trastabillando año tras año.

Un ciclo, que pudo ser y se interrumpió

Así los hechos, hasta 1990 en que en una elección ejemplar, el fallecido Roberto Pérez Guarch encabezando un nuevo grupo, con toda gente alejada de disputas y de renombre en el club, accede a la administración. Pero el destino, una vez mas, fue esquivo para con Platense, ya que tras la prematura muerte de Roberto, quienes ocupaban las vicepresidencias, Ferrari, Lupi e Ypas pugnan por el cargo de presidente y a regañadientes, se consensúa que Lupi, acceda al cargo máximo. Este fue el comienzo de un crecimiento sin pausa, con un excelente ordenamiento institucional, a cargo del secretario Mario Salvo y el Depto. Físico a cargo del Sr. Sugasti. Equipos de fútbol de primer nivel, disputando los puestos de privilegio en primera división, la concreción de la confitería/paddle con el apoyo y la dirección del Arquitecto Haedo, Escuelas, Gimnasios y Pileta climatizada durante todo el año, fueron suficientes para un crecimiento jamás pensado en materia societaria. El club, en estos primeros años de la década de ´90 era realmente un esplendor, al extremo, que al llamado a elecciones en 1993, no se presentó ninguna lista opositora.

El quiebre

Ya en 1994, todo siguió funcionando a la perfección, pero algo fallo. Aquel secretario general, deja el puesto y ocupa la primera vicepresidencia. Lupi, se toma sus vacaciones, y delega en su flamante vice, la conducción del club.  Un grupo de unos cinco o seis directivos y colaboradores se “amotinan” ante drásticas determinaciónes del presidente en ejercicio, “nadie tenía mas acceso al manejo de los dineros del club, a excepción del tesorero y se cumplirían los compromisos del día a día”. Así, a algunos “picaros”, se les había cerrado la caja y esto los molestó. Lupi, en un grave error político, que con el tiempo reconoció públicamente, congraciado con los sublevados, acepta la renuncia de Mario Salvo. De ahí en más la debacle del grupo y por ende de la institución.

¿Por qué otra vez?

Consultado por “los calamares de siempre” hace horas en Mar del Plata, del porque en esta última elección nuevamente apostaba por Lupi, Salvo, reconoce”que consideré en ese momento, el único con la impronta de hacer cosas por el crecimiento del club. Por capacidad de trabajo, creatividad y proyectos permanentes, y equipos de fútbol de nivel. Acepté integrar la dupla pensando en Platense y sin la participación de ninguno de aquellos que lo hicieran equivocar mal, y la conformación de un excelente grupo de trabajo para cada área con gente idónea y de probada honorabilidad”.

El hoy es preocupante

Acudimos a esta breve historia, para mostrar algunos vaivenes que se sucedieron en las entrañas de la institución, única damnificada y además desconocida por los socios.

Hoy, “ya es demasiado tarde para lágrimas”, el socio se expresó en las urnas y hay nuevas autoridades. Quienes asumieron la responsabilidad de la administración del club, y a una semana de iniciarse un delicado torneo, siguen con el pesado lastre de no haber cumplido con los sueldos del plantel profesional, de empleados y no reforzar el equipo como ameritan las necesidades.

¿Y el respaldo económico con que contaban?

En la madrugada del Viernes 21, el delantero Facundo Diz, en la Red fue tajante y sincero. “Nos deben desde medio sueldo de Octubre a la fecha.” Y aquí nuevamente debemos ingresar en la historia reciente.

De haber sido otro el resultado de las elecciones, ya se hubiera conformado la Mesa de Representantes, se habría concretado el convenio para el proyecto Benavides, con un ingreso económico inmediato para el club, también se habrían recibido beneficios económicos por la concesión y puesta en valor de la pileta descubierta, se hubiera concretado un convenio para restablecer las escuelas, vendido plateas promociónales, alentado la conscripción masiva de socios y grupos familiares con planes especiales de captación, renegociado el espacio aéreo, etc. 

Todo esto, como se aprecia eran hechos fijados y fácil de demostrar, según nos lo explicaran algunos integrantes de la perdedora lista naranja, y que nos consta, dado que en su momento, tuvimos acceso a estas propuestas.

¡¡¡Pero, perdió Platense!!!! Triunfó el odio de Ginanni, Conteducca, Fabbri y Cia.

Hoy 22 de Enero, la pregunta es ¿En que cabeza de dirigente idóneo que se precie de tal, cabe, que a siete días de iniciarse el campeonato, se le adeude al plantel tamaña cantidad de dinero?

Medio mes de Octubre, Noviembre, Diciembre y medio aguinaldo.

¿De que viven y vivirán los jugadores? ¿Son concientes de esta peligrosa realidad?

La respuesta estará en la cancha.

Ah, el técnico de Villa San Carlos es Ricardo Rezza, y Daniel Vega es de Almirante.-