¡¡¡¡Otra vez la ilusión!!!! En este sube y baja de emociones y sentimientos, hoy nuevamente sacamos pecho, como queriendo emerger de las profundidades anímicas en las que habíamos caído sumergidos hace apenas una semana. Sin ser extremadamente optimistas, lo visto en la oscuridad de la noche de ayer, acercó un pequeño rayo de luz, indicando ese camino que esta ahí, al alcance de la mano. En alguna de nuestras notas, esbozamos una parábola, que más que ilusoria, tenía visos de cierta realidad. “La mesa esta servida”.
Y anoche, esta imaginaria escenografía hogareña, demostró a propios extraños que aun lo está. El menú, “entrar al octogonal”, esta aún en etapa de cocción y mas allá de las calidades del juego, con placer vimos que nuestros comensales, los jugadores y el flamante cuerpo técnico, se están lavando las manos para sentarse a la mesa.
Se vio un equipo con hambre, con vergüenza deportiva, sintiendo la camiseta y lo importante, ganó. No tiene sentido entrar en el análisis del partido, sabemos bien que en estas finales lo importante es el resultado, si bien esto, siempre es producto de haber hecho las cosas mejor que el rival, y Platense lo hizo.
Solemos decir en este blog, que excepto uno o dos equipos que se cortaron en el torneo, el resto es la media. Nadie es mejor que el otro, y así quedó demostrado. Con garra, peleando cada pelota, haciendo sentir la localía, pasando la pelota a los de la misma camiseta, no jugando al pelotazo y haciéndola rodar contra el verde césped, fueron los factores únicos y necesarios para lograr el objetivo, ganar, sumar y achicar diferencias con el octeto de vanguardia. Hoy solo dos puntos no separan del salón comedor. De seguir en esta senda, y con esto tan simple como efectivo, una vez mas podemos decir ¡¡¡¡¡Claro que se puede!!!!
Ahora será el día a día, en una semana llegará Temperley, en ello hay que pensar, el resto vendrá sucesivamente cada siete días.
